Los científicos le piden al olivarero que piense cómo vender su aceite

Cajasol reunió, ayer, en el Centro de Convenciones y Congresos de Jaén, un foro de expertos, que reflexionaron sobre la coyuntura actual del sector del aceite de oliva y de las estrategias a seguir para garantizar no solo la supervivencia del negocio, sino la rentabilidad en la economía de mercado.

El olivarero no es unicamente un agricultor que trabaja una finca de olivos y produce aceite. Ahora, la nueva coyuntura económica le exige un paso más: también lo ha de vender. Por ello, cuando tire de los fardos y haga las cuentas de la cosecha, tiene que pensar cómo ha de ingeniárselas para obtener beneficios. Debe reducir costes, vender con otros para sacar más beneficios, investigar para que su zumo sea distinto y se lo quiten de las manos o inventarse cualquier cosa que le reporte dinero. Igual que los lecheros han creado los Omega 3 y otros reclamos que hacen que su producto sea diferente al resto. Sin embargo, producir aceite y esperar a que venga alguien a comprarlo ya no vale. La prueba más real es la caída del precio que se produce en origen.
Cajasol, con la colaboración de Diario JAEN, organizaron las segundas Jornadas Agrícolas y Comerciales del Olivar y del Aceite de Oliva. Congregaron a expertos que debatieron, precisamente, de la figura del agricultor en tiempos de crisis y de las nuevas técnicas de comercialización. Hubo médicos, presidentes de aceiteras, expertos en exportación, en comunicación y en estrategias de mercado. La alcaldesa, Carmen Peñalver, fue la encargada de inaugurarlas. Dijo que cuando existen dificultades, como ahora, también es tiempo de oportunidades. Pidió que se apueste por la calidad y por una comercialización adecuada. Además, recordó que la Junta, la Diputación y el Ayuntamiento irán de la mano de los emprendedores. Asimismo, manifestó que Jaén es la capital mundial del aceite de oliva, por lo que liderará las soluciones ante las dificultades. A su lado estuvieron el director de Diario JAEN, Juan Espejo, y el director territorial de Cajasol, Manuel Zambrano. Precisamente, Juan Espejo hizo un discurso ágil y optimista ante las posibilidades que tiene Jaén. Resaltó su liderazgo en la producción y animó para vender más y mejor gracias a proyectos ambiciosos e ilusionantes que dejen los ingresos que nacen del sudor de los olivareros en Jaén, lo que redundará en calidad y bienestar económico.
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