Inversores cordobeses compran una de las mayores fincas de olivos de Portugal

Portugal está en camino de entrar en el selecto grupo de los principales países productores de aceite, junto a España e Italia. Y es que las inversiones en campos de olivos se han multiplicado en este país en los últimos cinco años, fundamentalmente por parte de empresas españolas.

Las familias cordobesas De Prado, Martínez-Sagrera, Caro y Chambra, a través de su sociedad participada Franlabora, ya acumulan 7.289 hectáreas –extensión similar a la de Logroño–. La mayor parte de ellas, concretamente 5.100, corresponde a una sola finca que acaban de adquirir a la empresa portuguesa Casa Agrícola Santos Jorge, en el término municipal de Moura, ubicado en la región de Alentejo, en el centro-sur del país. Este latifundio está considerado como uno de los cinco mejores de Portugal.

La firma invertirá más de cincuenta millones de euros en estos terrenos, a los que habrá que sumar otros cuarenta que destinará a proyectos industriales.

El grupo prevé levantar una almazara en Moura con capacidad para molturar 850 toneladas al día, que será una de las más grandes de Portugal (actualmente ostenta este récord la que ya posee en Beja con 500 toneladas). En esta misma localidad Franlabora también construirá una planta de entamado, para aceituna de mesa.

Objeto de deseo
Desde hace varios años, la finca –propiedad del octogenario Nuno Tristâo– era objeto de deseo por parte de numerosas empresas e inversores españoles, entre los que se encuentran SOS, Benkinsa, Mercadona y Rafael Gómez (Sandokan, uno de los empresarios presuntamente implicados en el caso Malaya). Sin embargo, hasta ahora habían desistido de comprarla fundamentalmente por dos motivos. En primer lugar, aún existen ciertos problemas con el Gobierno portugués que se remontan a la época de la revolución de 1974, cuando Tristâo perdió la mayor parte de las hectáreas, que poco a poco ha ido recuperando aunque unas mil todavía continúan en manos públicas. En segundo lugar, una parte del terreno está ocupado por colonos, si bien existe un preacuerdo para que se retiren.

Los planes de los inversores cordobeses en Portugal van más allá, pues mantienen abierta la negociación para aumentar la superficie total de cultivo hasta las 8.300 hectáreas, según explica a EXPANSIÓN José Luis de Prado, consejero delegado y máximo accionista de la firma.

El objetivo de la compañía, con sede social en Portugal, es producir 95.000 toneladas anuales de aceituna en 2012, un reto muy ambicioso si se tiene en cuenta que la producción esperada en el país vecino para la actual campaña 2007/2008 es de 36.000 toneladas.
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